Opinión
Telecinco ha vuelto a demostrar que no tiene límites en su afán por captar la audiencia, no importa la verdad, ni el rigor periodístico, todo vale con tal de conseguir un anuncio que llene las arcas de sus propietarios.Sea con las Mama Chicho o destripando las vidas de personajes anodinos que han sido encumbrados a las alturas para retransmitir en directo sus caídas mientras son descuartizados, el canal de Fuencarral ha demostrado que todo vale con tal de ingresar un euro.
Ejemplos de la actuación de este canal de televisión, que emite en un espacio que es concesión pública, sobran, pero me centraré en el de hoy: un reportaje sobre rivalidades entre dos clanes gitanos del barrio de Sant Cosme, emitido por el programa de Ana Rosa Quintana.
Se refiere la "noticia", a un suceso pasado que , precisamente por su excepcionalidad, llenó las portadas de los medios de comunicación.
A partir de este suceso, se desvirtúa la noticia, se saca de contexto y se ofrece la imagen de un barrio en continuos enfrentamientos, donde la gente tiene miedo a hablar y a salir a la calle.
Falsedad tras falsedad, va ofreciendo una imagen de Sant Cosme y por ende de nuestra ciudad que no sólo nos ofende, si no que lanza por tierra el trabajo de entidades y personas que llevan décadas luchando, y con buen resultado, por un barrio mejor.
Presidí la Asociación de Vecinos de Sant Cosme en los años en los que la población se enfrentó al narcotráfico con numerosas manifestaciones y actos de protesta , de los que fui uno de los impulsores.
Desde entonces, las administraciones se pusieron las pilas y se fue avanzando a pasos agigantados hacia la normalización y la integración.
No podemos olvidar que el popular barrio pratense acoge importantes equipamientos y actividades como la Policía Local, los Juzgados, los Bomberos, el Mercadillo Semanal, el Pesebre viviente del Prat o el festival Esperanzah; y que sepamos los miles de personas que acuden a cada uno de estos servicios o actividades lo hacen a cara descubierta y sin guardaespaldas.
Pero como parece ser que todo vale, con tal de ganar dinero, una vez más se vuelve a manchar la imagen de las miles de personas honestas de nuestra ciudad que trabajamos y vivimos dentro de la ley.
Efectivamente, como digo en el titular, poco se puede esperar de un canal de televisión como telecinco que diariamente inunda las ondas televisivas con su particular forma de hacer televisión y que periódicamente se supera con espectáculos tan lamentables como el de hoy.
Sólo cabe esperar, y por qué no exigir, una rectificación, que explique la auténtica realidad de Sant Cosme, un barrio en el que todos sus vecinos han invertido sus ilusiones y esfuerzos por conseguir una vida digna y un merecido respeto al que telecinco les ha faltado.(JAC).