El presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, y la alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat , Núria Marín, han urgido al Ministerio de Fomento a construir el túnel de la R2 de Rodalies y el intercambiador de La Torrassa, que conectará las líneas L1 y L9 de Metro con Rodalies y que tiene un presupuesto de 400 millones de euros.
En una reunión en el consistorio, ambos han defendido que esta infraestructura convertiría a la red de Rodalies en el metro regional de Catalunya, mejorando el transporte público para los 4,72 millones habitantes de la región metropolitana, han informado en un comunicado conjunto este jueves.
El proyecto ejecutivo está hecho desde noviembre de 2009, con lo que las obras podrían comenzar en cuanto Fomento destine la dotación económica correspondiente: "Se trata de una actuación acordada hace años por todas las administraciones implicadas, sólo pendiente de la decisión política del Gobierno central", ha asegurado Marín
Valls ha advertido de que "la no construcción de esta infraestructura unida a la reactivación económica, que comporta un mayor uso del vehículo, provocarán el colapso circulatorio en los principales accesos a Barcelona".
La construcción de este túnel ferroviario reconfigurará la red dando continuidad a las líneas de Rodalies de costa a costa (Vilanova-Mataró) y de interior a interior (Vilafranca-Granollers) y permitirá equilibrar la carga de circulación de los túneles de Passeig de Gràcia y Plaza Catalunya para incrementar las frecuencias.
También se podrá mejorar la conexión ferroviaria entre la capital catalana y el Aeropuerto de El Prat e incrementar la oferta de servicios entre El Prat y Sants, ya que rebajará el nivel de saturación actual de la R2.
El proyecto incluye la Estación Central de La Torrassa, un intercambiador que dará servicio a 90.000 pasajeros diarios y unirá las L1 y L9 de Metro con las líneas de Vilanova y de Vilafranca de Rodalies, así como la construcción de la estación soterrada de Bellvitge-El Gornal.(EP)